
Por: Rogel Soto
El presidente Luis Abinader garantizó ayer durante La Semanal con la Prensa que el Jardín Botánico no será afectado por la ampliación de la avenida República de Colombia, e incluso anunció que se añadirá un anexo de 20 000 m² de áreas verdes en un terreno actualmente degradado. El mandatario tildó las protestas, impulsadas principalmente por la oposición y sectores ambientalistas, como objeciones sin fundamento, insistiendo en que “se está protestando por algo que no se conoce”.
El verdadero beneficio del nuevo proyecto vial radica en su capacidad para descongestionar el tráfico en zonas críticas como Lincoln, Próceres y Jacobo Majluta, al permitir un tránsito fluido sin semáforos gracias al túnel diseñado por el Ministerio de Obras Públicas. Esto sin invadir el Jardín Botánico, preservando su función ecológica y ampliando, no reduciendo, su tamaño con un corredor de recreación y ejercicio al norte.
Mientras la oposición insiste en cuestionar lo que no conocen, la realidad es que este plan no solo cumple con mejorar la movilidad urbana, sino que impulsa la creación de nuevos espacios públicos y zonas verdes, un elemento central de la gestión ambiental del gobierno. Esto debilita los argumentos de quienes sólo buscan confundir a la población sobre supuestos daños al patrimonio ecológico.

