
Por: Dairo Mendez
¡Buenos días y Dios a les bendiga a todos. padres, madres y los distinguidos
representantes de la prensa dominicana que nos acompañan hoy! Es un verdadero
honor y un privilegio tenerlos aquí.
Han sido invitados todos, en el día de hoy para compartir con todos ustedes una realidad
y un compromiso profundo que venimos construyendo juntos las asociaciones de Padres,
madres, tutores y amigos de la escuelas (APMAE) y el distrito educativo 15-02.
Mi nombre es Daniel Enrique D Oleo presidente de la federación distrital de APMAE,
quienes me acompañan son al igual que yo miembros de las directivas de APMAEs de
los centros educativos públicos bajo la jurisdicción del distrito educativo 15-02.
Estamos aquí para comunicarles, de primera mano, el trabajo organizado, socializado
y proactivo que todas las Asociaciones de Padres, Madres y Amigos de la Escuela,
conocidas como APMAE, de la jurisdicción distrital 15-02, venimos realizando en esta
ocasión con el lema NINGÚN NIÑO FUERA DE LAS AULAS.
Nuestro objetivo primordial y nuestra razón de ser es una: trabajar incansablemente en
favor de la educación dominicana.
Quiero ser muy claro y enfático en un punto crucial que a menudo genera confusión. En
este distrito y en toda la comunidad, les hablo de la llamada “falta de inscripción o de
cupos” en nuestro territorio del 15-02
La realidad es lo que realmente enfrentamos y lo que nos ocupa día a día es una masiva
preferencia de ciertas escuelas en donde la mayoría de los padres quisieran tener sus hijos,
lo que combinado con la carencia significativa de espacio físico para poder construir
más aulas nos lleva a la realidad de hoy.
Esta es la verdad que vivimos y la limitación con la que trabajamos. Sin embargo, no nos
detenemos ahí. Lo que sí existe es un esfuerzo mancomunado para que los padres acepten
las opciones de diferentes escuelas que cada una de nuestras asociaciones de padres, las
APMAE, les ofrecemos en conjunto con el apoyo y trabajo del Distrito Educativo 15-02.
No se trata de negar un cupo, sino de gestionar los recursos disponibles de la mejor
manera en relación al número de aulas en cada centro educativo.
Entendemos perfectamente el anhelo de muchos por la tanda extendida. Es un modelo
educativo que valoramos y sabemos que ofrece múltiples beneficios.
No obstante, por la razón antes mencionada, la falta de espacio para construir más aulas,
no todas nuestras escuelas pueden ser gratificadas con esta modalidad. Es una realidad
que nos duele, pero que no nos desanima. Seguimos explorando.

